
Juro que te amé.
Juro que entendí a Dios,
no a Dios padre,
a dios mar, a dios pez.
Juro que el sol penetró
en las rocas.
Yo, yo vi la luna
caer de un árbol
mientras la tierra gritaba
ante el impacto.
¡Yo lo vi!

Estambres descosidos
de placer
en mis pistilos.
Tenías la frente azul
y tez de estrella.
Juro que amé
tu pelo
mineral de tierra.
Entré en tu boca
camino de tu alma
y llegué allí.
Bajaban flores por
tus venas
y yo las besé,
lo juro.

Y después de
tu carne,
fui rayo,
viento,
nubes.

...