lunes, 16 de noviembre de 2009

Los sentimientos de Helena

Dante Gabriel Rossetti's, "Helen of Troy"






Los sentimientos de Helena



  • El amor y los sentimientos encontrados de Helena de Troya toman su espacio en esta entrada que tengo el privilegio y el honor de compartir con mis queridos amigos, Antonio Martín Ortiz y Soledad Sánchez Mulas, grandes conocedores del mundo clásico y geniales escritores.
  • Es un placer contar con su respaldo y su sabiduría.



Helen and Paris, Grotto of Buontalenti





Helena enamorada


¿Por qué habrá insuflado Afrodita
certero amor en mi pecho?

¿Por qué amo a Paris aun sin quererlo?

He de dirigirme a él sin demora:
conocerá mis honrados deseos, mi fidelidad
al rubio Menelao, querido esposo...




Love


Por otro lado, Menelao nunca se enfrentó a Teseo,
si no hubieran venido mis hermanos sorteando
los miedos que se deslizaban desde el infierno
en el que Perséfone sufrió mi misma suerte,
¿qué habría sido de mí?



Venus




Será quizás que a Menelao no le hubiera importado
mi deshonra, aunque no fuera tal.
Teseo fue, en todo caso, un caballero,
no lo es Paris,
¿por qué ese arrojo desconsiderado
e indigno se transforma en ardor
dentro de mi espartano sentimiento?
¿Por qué, Paris, se me aparece tu cuerpo en sueños
y cuánto más lo intento apartar de delicioso deseo
más me atormenta?




Music





¿Por qué, Afrodita
has insuflado el amor en mi pecho?

¿Por qué no acude algún dios
que me fuerce a rechazar
con harta convicción al bello Paris?




Sleeping beauty, National Museum, Athens



¿Por qué sólo Afrodita arroja el halo de amor a mi broncínea piel?
¿Por qué alado Eros arroja tales flechas directas a mi corazón
cuando sólo en mí debería tener cabida mi fiel esposo Menalao?





Menelao, National Museum Athens





¿Qué será de mí, indigna mujer, si atravieso la frontera de Esparta
en dirección a Troya con la única garantía de las palabras
de un desconsiderado y antojadizo troyano?



Athena plaque





¿Qué será de mi amada niña?
¿Qué hablarán de mí Clitemnestra
y Agamenón en dulce reunión familiar?
¿Qué acciones llevará a cabo mi esposo?
Bueno sería comprobar si viene a buscarme
o permitiría que fueran otra vez mis hermanos
mis únicos liberadores.




Menelao, National Museum, Athens




No, no he de ir contigo Paris, por propia voluntad.
Ven a mí, si pretendes que en tu barco de vuelta a Troya,
habite una espartana.




Jacques-Louis David, Paris y Helena




Y si esa espartana que viaja contra su voluntad,
está enamorada de su raptor,
no ha de saberlo
mi esposo, el rubio Menelao,
ni ha de saberlo su familia,
instigadora quizás de duras críticas.
Y mucho menos mi pequeña adorada.




John William Godward - A Grecian Lovely




Y mientras espero un viaje forzoso,
tu cuerpo cubrirá mis sueños,
y tu sombra alentará mis deseos,
amado Paris.

¿Por qué Afrodita
insuflaste este amor irresistible en mi pecho?


Firmado: Elena Pascual



Museo Monte Martini, Rome



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56 comentarios:

Soledad Sánchez Mulas dijo...

Bello, Elena, muy bello.

También tú te has adentrado en el pensamiento de Helena, también tú manejas, de forma exquisita, la duda y el deseo.

Un auténtico placer esta colaboración.

Un beso.

Soledad.

REBELDE dijo...

Excelente narrativa de tão profundos sentimentos e imagens muito bonitas gostei Um Beijo Doce!

Pedro Ojeda Escudero dijo...

Qué gran historia la de Helena. Aun cabe mucho arte en ella.

helena dijo...

Qué prueba tan difícil para una mujer y qué dolorosa elección.
Escribes como los ángeles.
Un abreazo.

Odel dijo...

Duda y deseo son como dos hermanas gemelas inseparables,preciotexto e imagnes Elena

ANTONIO MARTÍN ORTIZ. dijo...

Amiga Elena Pascual, Elena Clásica, Φίλη Ἐλένη,

Me regocijo en estas imágenes preciosas que nos presentas de Paris y Helena, del Amor, de la propia Venus, la causante de todo, de la Música como Divinidad, y de la Belleza durmiente. Le sigue el pobre y maltratado Menelao, el despechado tal vez, y la propia Atenea, que preside todo lo que ocurre en el mundo Griego. Y luego nos ofreces una bellísima imagen erótica, en la que el Amor es el causante de toda una lucha, cuando ella se resiste ante las pretensiones de él.

Voy leyendo y representándome el mito, tan exquisita y rigurosamente explicado por ti. Y tenemos a Helena que se queja ante Venus de que le haya insuflado esa pasión irresistible por Paris, que tanto daño hará al rubio Menelao, con su correspondiente epíteto homérico que tanto abunda en la Ilíada. Nos recuerdas magistralmente el incidente con Teseo, que se la llevó a los Infiernos, teniendo que ser rescatada por sus hermanos, los Dioscuros, los Hijos de Zeus, sin que Menelao tuviera nada que hacer, porque aún no existía en la vida de Helena.

Los tormentos, cual Furias envenenadas con los ojos ensangrentados, de que es víctima Helena, ante la indecisión de hacer lo que le dice su Instinto y no lo que le dicta la Razón.

Y luego están Clitemnestra y Agamenón, los familiares más próximos de Helena. ¡Si la pobre Helena supiera el destino que se urdirá para Agamenón primero, y luego para ella misma, para Clitemnestra! Claro, con una diferencia. Agamenón será triunfador de la Guerra de Troya y amante esposo de su esposa; Clitemnestra, por el contrario, caerá en los brazos de Egisto, su amante, sin ninguna clase de dudas ni reproches por su parte.

Y es que Clitemnestra y Helena eran dos mujeres muy diferentes: impúdica y desvergonzada la primera, y honesta y fiel la segunda, por lo que vamos viendo.

No me quiero extender más en este comentario, querida Elena, Φίλη Ἐλένη, sino sencillamente dejar constancia, una vez más, de tu inmensa, Gigantesca, capacidad creativa, que tan hondos e inspirados poemas produce; y decirte al mismo tiempo que ha sido para mí una experiencia inolvidable y emocionante compartir contigo y con Soledad esta coincidencia en el tratamiento de Helena.

Puedes estar segura de que volveré con asiduidad a tu poema, para percibir y gozar más veces tanta delicia como hay en él.

Un beso y un abrazo especiales, Querida Elena, Φίλη Ἐλένη,

Antonio

Lozzano dijo...

Magnífica recreación de las incertidumbres que atormentan a la bellisíma Elena en sus dudas de dejarse llevar por sus sentimientos o ser fiel.
Con tu relato nos has reflejado maravillosamente su sentir.
Un placer como narras.
Besazos.

Marina dijo...

Afrodita, juguetona y lianta, encierra el amor en el pecho de Helena como si fueran hilos de plata que tiraran hacia su amado, sin tener en cuenta recelos, condiciones y compromisos que atenazan su corazón.
Helena libre para amar, correr hacia su amado y olvidar el dolor que causa y que causará... a ela misma, a los demás.

Helena es un personaje que siempre me ha fascinado.

Preciosas imágenes.

Besos para adornar el amor.

Trini Reina dijo...

Por qué. La eterna pregunta...

Me ha gustado este adentrarse en los pensamientos de Helena. Ahondar en sus dudas y percibir que el deseo con la razón puede.

Has hecho un trabajo magnifico.

Besos

Catalina Zentner Levin dijo...

Desde el Blog de Soledad, he pasado por el de Antonio y llego hasta aquí, siguiendo a la magia.

¡Y comprobé que ella existe!

Saludos afectuosos,

Isabel Barceló Chico dijo...

¡Qué hermosas las inútiles lamentaciones de Helena! Amar y no querer sentir ese amor y desear marcharse con el amado y fingir ante todos que es por fuerza y no por pasión que ha subido a esa nave... Qué bien has reflejado las contradicciones y las pasiones que mueven a los seres humanos. Y el deseo de mantener, a toda costa, la apariencia del honor y el afecto de los seres queridos. Un abrazo, querida amiga, un texto conmovedor.

Meri Pas Blanquer (Carmen Pascual) dijo...

Hermosísimo texto donde Helena se lamenta, se duele de sentir lo que en el fondo la está llenando de vida.
Aunque exteriormente se está flagelando, interiormente está diciendo gracias Afrodita, gracias porque estoy viva, porque has puesto a Paris en mi camino y mi espíritu late y mi sangre se derrama y mi piel está sedienta ansiando esas manos grandes para calmarle esa sed que no se atreve a decir.

El amor, nos juega las peores pasadas.

Y las mejores...

Te felicito, gran trabajo.

 Mayte dijo...

Ah señorita! pero mire por dónde le sale a usted la belleza, de Helena a Elena, un reflejo de la una contra la otra.

Bellisimo niña, siempre bikos con cariño para ti. ;)

Danube S. dijo...

Que hermoso poema, Elena. Coincido con Carmen en que en el fondo hay un agradecimiento a la diosa del Amor por haber enrredado asi, hasta hacerlo irresistible.

Un beso, poetisa *
CLsT

GUILLE dijo...

Sentimientos amorosos contradictorios en un corazón rebosante de amor, en la vida de una mujer querida, admirada y deseada por príncipes y dioses.

Las imágenes, de una belleza incalculable,sirven de cimiento al poema, haciéndolo más carismático y profundo.

Un abrazo.Proserpina

ANTONIO MARTÍN ORTIZ. dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ANTONIO MARTÍN ORTIZ. dijo...

Amiga Elena, Φίλη Ἐλένη, Querida Elena,

Me paseo una y otra vez por tu poema para saborear tus exquisitas palabras y, como es lógico, también releo los comentarios. Dice el dicho popular que de sabios es rectificar, y, para adentrarme también en mi terreno, dijo Cicerón en una de sus Filípicas: Cuiusuis hominis est errare [De cualquier hombre es propio equivocarse]. Pues eso, en mi comentario primero, redactado con cierta prisa debido a la emoción provocada por la lectura de tu precioso poema, dije:

Nos recuerdas magistralmente el incidente con Teseo, que se la llevó a los Infiernos, teniendo que ser rescatada por sus hermanos, los Dioscuros, los Hijos de Zeus, sin que Menelao tuviera nada que hacer, porque aún no existía en la vida de Helena.

El texto debe quedar así:

Nos recuerdas magistralmente el incidente con Teseo, que, después de raptarla, se fue a los Infiernos a raptar a Perséfone, teniendo que ser rescatada Helena por sus hermanos, los Dioscuros, los Hijos de Zeus, sin que Menelao tuviera nada que hacer, porque aún no existía en la vida de Helena.

A mí no me importa corregirme a mí mismo, porque ésa es la única forma de ser rigurosos y aprender algo cada día.

Un beso y renovada felicitación por tu poema,

Antonio

Carla Tormenta dijo...

Dulce martirio
tormenta estripitosa,

relámpagos amenzan mi calma
y mi sosegado amor.

Un hombre, un ser elevado
me acaricia el alma,

me devuelve el latir apresurado
el pulso me acelera

es Paris, un delíte inesperado
me transtorna
me aniquila la razón
mi corazón bombea, !oh venus¡

Oh diosa, libérame, devuélveme
el amor hacia Menalao

y no permitas que mi cuerpo anhelante de deseo sucumba ante Paris.

Aunque si es tu designio, oh venus
me someto a tí y que el destino me lleve de tu mano.


------------------

Carla Tormenta dijo...

Fascinante recreación Elena.
Helena de troya continua viva, ahora más que nunca de tu mano.

Soledad hizo un poema delicado y amoroso.

Antonio nos enseñó el principio de todo, el verdadero origen para amar todavía más a los clásicos.


Felicidades

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REBELDE dijo...

Elena gosto da tua foto no perfil pareces uma menina apanhada a roubar doces:))Beijo.

Anónimo dijo...

Bellísimo, las fotos y los versos.

¡¡Saludos!!

Loli Martinez dijo...

Me has hecho sentir esos momentos de incertidumbre donde el amor se estremece .Las imágenes geniales.
Fantástica forma de despertar nuestra sensibilidad.Gracias por hacernos sentir.Un besazo .

Anónimo dijo...

Elena es la tercera vez que intento entrar en tus comentarios y cuando estoy casi acabando para publicarlo me desaparece.

Resumiendo mis anteriores comentarios he llegado a la conclusión que son muy bonitas las imágenes que publicas, pero el esoterismo, la lectura tan interesante que se podía extraer de la ventana abierta, no se consigue co el realismo.

Te inspiraba poesía, música, alegría y dolor, desbordaba la imaginación el sutil aleteo de la mariposa atrapada en una celda y el intento fallido de su eterna huida. Con que fuerza el ala derecha, tira de la izquierda apresada por una mano invisible, con el intento de que caiga. La mariposa permanecia con sus alas trasparentes en la ventana aleteando por su atardecer y su aurora.
Un anrazo muy fuerte Proserpina

Para poder publica tengo que hacerlo a través de ANÓNIMO

ANTONIO MARTÍN ORTIZ. dijo...

Amiga Elena, Φίλη Ἐλένη, Querida Elena,

Siempre es una gozada entrar por tu ventana, que ya ha desaparecido, lo que debe significar que La puerta está ahora abierta. Te encuentro ahora metamorfoseada en esa preciosa

Girl in a yellow drape 1901- John Godward,

y no he podido librarme del placer de instalarte en mi columna lateral, con enlace a tu casa ahora. Es que eres una preciosidad en todos los aspectos. Espero que no tengas inconveniente alguno en lo que he hecho.

Recibe, Amiga Elena, Φίλη Ἐλένη, Querida Elena,

Un beso cariñoso,

Antonio

 Mayte dijo...

Un abrazo grande bonita, que comiences estupendamente tu semana.

Bikiños;)

ANTONIO MARTÍN ORTIZ. dijo...

Amiga Elena, Φίλη Ἐλένη, Querida Elena,

Correspondiendo a tu elogioso y generoso comentario en LA BLOGOTECA, te he dejado allí mismo el mío, que transcribo aquí, para mayor comodidad tuya.

Muchas gracias, Elena Pascual. Tengo que manifestar que yo, cuando quiero acercarme a los Clásicos, lo puedo hacer de dos maneras. La una es recurrir directamente a ellos; la segunda es visitar el blog de Elena Pascual, es decir, tu blog, en el que, con el pseudónimo de Elena Clásica, nos ofreces un espacio en el que la inspiración, la creatividad y el buen gusto están por todas partes adornados con resonancias Clásicas siempre bien atinadas. Así, como el que no lo quiere, con un par de palabras nos has resumido estos hexámetros de Horacio:

Aut prodesse uolunt aut delectare poetae
aut simul et iucunda et idonea dicere uitae.
Quidquid praecipies, esto breuis,
(Horacio, Arte Poética, 333-5)

(Los poetas desean o ser útiles o deleitar, o decir al mismo tiempo cosas agradables y también apropiadas para la vida. En cualquier norma que des, sé breve).

Es que no se puede pedir más: es lo que acabas de hacer tú en tu comentario anterior.

Muchas gracias nuevamente, Amiga Elena, Φίλη Ἐλένη, Querida Elena,y recibe de mi un beso cariñoso,

Antonio

GRANADA VIDA SANA dijo...

MMMMMM ELENA, EL AMOR ES ASI SIN CONTROL SIN REGLAS, LO ROMPE TODO
LO DESTROZA TODO
MUUUUUUUUUUUUA

HAMELIN dijo...

linda entrada amiga !!!

buenas eculturas y bajorrelieves !

un gusto pasar por tu pequeño paraiso

te dejo un abrazo grande !!!

Hammelinn

..........................

Fatalidad de ser:

A veces voy fluyéndome, espiritual y diáfano,
me voy desabismando, me pierdo de mí mismo,
vuelo en millones de alas como una luz de estrella,
huyo en millones de olas como un agua de océanos.

Soy mi propio no ser, la absorción infinita,
un desvanecimiento de la sangre y la idea,
imposible a las hambres, imposible a los sueños,
y a sentirme en mis ansias y en mi esencia inasible.

Se diría una muerte, un cósmico retorno
entre los infinitos de sombras y de mundos,
o un vacío de Dios helando los espacios.

Y al extinguirme, inmenso y hondo como la Nada,
siento aún que me quemo en un horror sublime,
como si el pecho en llamas irguiese mi destino.

Carlos Sabat Ercasty
Sonetos de las agonías y los éxtasis
Academia Nacional de Letras
Montevideo 1977

Anónimo dijo...

Me encantó lo que acabo de leer y te lo aplaudo. Bravo!!!

Un placer leerte.
Saludos.

Anónimo dijo...

Tremendo..

RITMO RANCIO dijo...

Un placer poder compartir momentos creativos, como los que presenta Helena en esta entrada, para nosotros todavía iniciados en este mundo del blog.

Saludos musicales

ALBINO dijo...

La conclusión que saco es que la historia ha cambiado todo menos el amor. Es posible que ocurra lo contrario, que el amor cambie la historia.
Pero el amor esta presente siempre sea heteroxual, bi sexual o como el de Neron de quien dicen que era el hombre de todas las mujeres y la mujer de todos los hombres.
Y esa Carmina Burana le va de maravilla, así como la música cinemotografia que creo que es de Henri Mancini.
Un beso clásico

ANTONIO MARTÍN ORTIZ. dijo...

Amigas del alma, Soledad y Elena,



Inspirado y enriquecido por vuestras aportaciones en forma de comentarios, he recompuesto la exposición sobre Safo de Lesbos, incorporando vuestros comentarios al cuerpo del texto. Os manifiesto que siento toda la admiración por vuestra sabiduría y vuestros encantos y, al tiempo que mi afecto más sincero, os transmito toda mi admiración.



Un beso doble (uno para cada una)



Antonio

1600 Producciones dijo...

Alucinante!!!! Tenía olvidado este blog... tonto de mi.

Saludos

ANTONIO MARTÍN ORTIZ. dijo...

Amigas del alma, Elena, Ἐλένη, Carmen y Soledad,

Os dejo en vuestro correspondiente espacio, para mayor comodidad vuestra, el comentario que os he dejado en el mío:


Amigas Carmensabes, Carmen Pascual, Elena Clásica, Elena Pascual, y la que cuida su locus amoenus, Soledad Sánchez,

Estábamos hablando de una mujer grande y gigantesca, por su grandiosidad e inspiración, y recibo tres sabrosos comentarios, de tres mujeres grandes también y llenas de inspiración, vosotras tres.

Tendré que subirme a una montaña, quizá a las faldas de Sierra Nevada, para inspirarme lo suficiente, de forma que sea capaz de responderos con la dignidad y la altura que vosotras os merecéis.

Eso llegará en su momento, pero necesito tiempo para una labor tan exigente.

Un beso, es decir, tres (uno para cada una),

Antonio

Corso dijo...

Helena y Paris, el origen del eufemismo.

Juan A. dijo...

Delicioso tu espacio, Elena. Enhorabuena. Ha sido un auténtico placer pasear por sus páginas.

Un saludo.

 Mayte dijo...

Buen fin de semana encanto...Un biko grande siempre.

calamanda dijo...

Es una entrada espléndida, me ha
gustado muchísimo...también la
pintura prerrafaelista.

Un beso.

Narci M. Ventanas dijo...

Todo un despliegue de arte en imágenes y palabras, con una gran profundidad en los sentimientos de los personajes. Hay tantas preguntas sin respuesta en el amor.

Saludos

ANTONIO MARTÍN ORTIZ. dijo...

Amiga Elena, Φίλη Ἐλένη, Querida Elena,

Correspondo al comentario elogioso que has hecho en el locus amoenus de Soledad Sánchez Mulas sobre mi microrrelato, invitándote a que leas las palabras también elogiosas sobre ti que escribe Althena, de La Costilla Incómoda, en un comentario a mi primera explicación de Safo de Lesbos.

Un gran beso y un abrazo,

Antonio

Natàlia Tàrraco dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Natàlia Tàrraco dijo...

Hola Elena, vengo observando tu pasión por lo clásico, te secundo amiga y te seguiré de cerca. Bellos textos, fatídico amor, capricho de Venus en el pecho de la bella, en el del bello troyano, ayyy, los dioses juguetones.
Bellas imágenes.
!Salves! desde el quinto pino, lo mejor para el 2763 A.V.C.

Isabel Barceló Chico dijo...

No sabes la ilusión que me hace, querida Elena, saber que tienes a Dido entre las manos aún... Y me emociona la pasión que pones al hablar de ella. Siempre he dicho, y cada vez estoy más convencida, que ningún libro está terminado sin el lector. Sois/somos los lectores los que podemos extraer de los libros visiones nuevas. Un abrazo muy fuerte, querida amiga.

rlfox dijo...

Sentí:
En un marco social donde las palabras están vacías y el compromiso es una nimiedad, reaparece Elena, sé cuan arto difícil es proseguir la estela marcada con anterioridad tanto por deseo propio como el encauzado por terceros.
Siendo de natural distinto a Paris, no obstante, fantaseo, situándolo a las afueras de Esparta, haciendo mía su pesada carga quizás pensase así:

El atardecer trae consigo la noche.
Inevitable.
Los vientos dicen: “SI”,
Los astros, permanecen inmóviles,
Los olivos vencen sus ramas, apuntalan el Si
Los oráculos callan: “Siervos viles”
Inevitable.
Dioses, decidme que concebiré
Presiento seamos actores a merced de vuestro ingenio.
Presiento que mañana con ella partiré.
Dioses, si nada decís, que comience el incendio
Inevitable.
La transgresión trae consigo la venganza.

ANTONIO MARTÍN ORTIZ. dijo...

Amiga Elena,

Te dejo aquí, en tu espacio, para mayor comodidad tuya, el comentario que te he dejado en el mío:

Ποικιλόθρον᾽ ἀθανάτα Ἐλένη
Inmortal celeste, de ornado trono, Elena,

Amiga Elena, Φίλη Ἐλένη, Querida Elena,

Quiero encabezar este comentario, en respuesta al tuyo, robándole a Safo de Lesbos el primer verso del primer poema del libro primero de la obra que de ella se conserva.

Haces un comentario que no tiene desperdicio: dejas a Safo en el lugar que le corresponde y la adornas, adornas su poema, con todo un cúmulo de eruditas y atinadas referencias, perfectamente ajustadas todas ellas a lo que se pretende, que es comentar el poema. Te pasa, querida Elena, como le pasaba a Ovidio, según nos confiesa él mismo desde su destierro en el Ponto Euxino:

Y todo lo que intentaba escribir, me salía poesía.

Pues igual pasa contigo: tomas entre tus manos la pluma (aunque ahora se llame el teclado del ordenador y las palabras y los pensamientos fluyen con transparencia y nitidez, al tiempo que lo hacen de forma natural, sin pretensiones de ser más que lo que son, la expresión de la poesía entendida y vivida.

Tenemos que reconocerlo todos, amiga Elena: tus conocimientos son sólidos y exhaustivos, casi me atrevería a decir, y la forma que les das es la de la poesía pura, la de la prosa vibrante, la de los pensamientos transparentes y la de los sentimientos más nobles. Todo ello, conjuntado, forma una auténtica obra de arte que alegra el espíritu y enriquece grandemente a quien lo lee.

Puedes dar por seguro que este comentario tuyo recibirá, en su momento –hay que tomarse las cosas con calma, si uno quiere hacerlas bien-, los honores y el lugar que se merecen en este humilde espacio, que ya parece, y es, más tuyo que mío, cosa que, como puedes suponer, le da mayor categoría y rigor filológico, además de la belleza platónica y humana que aporta tu persona en su totalidad.

Te deseo un buen fin de semana, Amiga Elena, Φίλη Ἐλένη, Querida Elena, todo mi agradecimiento y, por supuesto, toda mi admiración.

Un beso Gigante acompañado de un abrazo Eterno.

Tu admirador,

Antonio

Sir Bran dijo...

Me encantó leer estos pensares en voz alta, de los más bellos trozos de ese mundo de expresiones descorazonadas y amores libres dentro de su pequeña esclavitud.
Es más bonita la historia, contada desde un ángulo muy cercano a la literatura.
Y preciosas fotos.
Algo se nos perdió desde esa época.
Pero el mármol trata de recordárnoslo.
Saludos.

aapayés dijo...

Maravilloso post..


Un placer pasar por tu espacio..

Un abrazo
Saludos fraternos.

Que tengas un feliz fin de semana..

Natàlia Tàrraco dijo...

Elena...Safo dijo algo sobre..."no volveré junto a tí, no volveré nunca jamás", ojalá Helena se lo hubiera dicho a...Menelao, pero los Hados.

Por favor, cuando tengas un momento, si quires, léete el relato que he colgado del JUEVES, tema: Frío, mucho frío. Dime luego tu opinión que me importa mucho. !salve!

Anónimo dijo...

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